Aponia Q.l. Mandata es la misma mujer que aparece como difunta en la placa descubierta en el mismo solar (CILAE 106 = NEFAE 45; AE 1994, 838; HEp 6, 81). Q. Aponius Rusticus tal vez fuera su patrono, tal vez su esposo conliberto de la misma familia. Parece ser a primera vista el epitafio del médico junto a Aponia Q.l. Mandata y a la hermana de esta, Eucharis; y así lo confirmaría la frase en plural hic sit(i) sunt. Los dos primeros se mencionan en nominativo, mientras que la hermana Eucharis en dativo. Parece verosímil suponer que fue el médico quien encargó su propio monumento funerario antes de morir. Después de su defunción, Aponia Mandata encargó el epitafio añadiendo la mención de su propia hermana, ya fuera entonces esclava de la misma casa, ya fuera una conliberta, es decir, (Aponia) Eucharis. Para enfatizar la iniciativa ante mortem del médico en el encargo del monumento, la propia Aponia añadió en la última línea la invocación et tu et tibi, es decir, “encargaste tú (este monumento) y para ti”; una frase con muy pocos paralelos en la epigrafía funeraria del mundo romano (Cf. CIL XI 6169 = ILS 6650, Suasa en Umbria; AE 1964, 221a, Pompeya; CIL III 3195b = 8807, Dalmacia).
El cognomen Mandata sólo está documentado en Hispania en estas dos inscripciones emeritenses con la misma mujer. Eucharis es un cognomen griego insólito en Mérida y poco usado en Hispania, con tan sólo dos testimonios más (FE 155 = AE 1990, 645 = CIL II/14, 111a = HEp 4, 920, Valencia; HEp 2002, 28 = AE 2002, 860, Barcino).
De época flavia, por la paleografía y la simplicidad formularia.