Debajo de un gran vacío de 22 cm, reservado quizás para albergar otro epitafio, aparece el último texto de la placa en la sexta y última columna. Debajo del texto se extiende otro vacat de 10 cm hasta el borde inferior de la placa. Está grabado en capitales cuadradas de buena factura con rasgos de la escritura libraria discernibles en la forma ovoide de las O y la estrechez de las P. Algunas de las letras tienen pies bien marcados, especialmente las T y todo el formulario final s.t.t.l. La ordinatio no es perfecta, con una notable inclinación descendente del renglón en las dos últimas líneas.

Contexto arqueológico de aparición: formando parte de una sepultura, la “Tumba H”, en la intervención arqueológica "Necrópolis del Albarregas" (nº registro 42 del Consorcio), desarrollada durante 1987. La gran concentración de inscripciones sepulcrales halladas se puede contextualizar dentro del área funeraria que discurriría paralela a la via ab Emerita Caesaraugustam, en uso durante los siglos I-II, para quedar arruinada en torno a los siglos III-IV, reutilizando los materiales anteriores. Ninguno de los epígrafes apareció in situ, puesto que habían sido aprovechados, en la propia época romana, para formar parte de la decoración interior de otras tumbas. Pertenece a la colección epigráfica del Consorcio (nº de inventario 42-00-26). Se encuentra desde 2012 en la exposición permanente del M.N.A.R. (Planta Primera, Sala VI).

J.L.R.S. (1993), J.C.E. (2016).

J.M. Romero (2007). CCMM.

Es el único testimonio conocido de miembros de la gens Naevidia en la colonia emeritense, con el padre y la hija compartiendo además de sus nomina también sus cognomina: C. Naevidius Optatus y Naevidia C.f. Optata. La filiación de la hija se expresa con una forma fuera de lo corriente, por medio del nombre completo de su padre. No hay paralelos del uso de la filiación con los tria  nomina del padre en la epigrafía emeritense. Se encuentra más frecuentemente el nombre completo cuando se trata de un dueño de esclavos o de un patrono de libertos.

Además, es el único caso conocido en la epigrafía funeraria emeritense donde la edad de fallecimiento interrumpe el formulario funerario habitual, al interponerse la cifra entre los dos elementos h.s.e. y h.s.t.t.l.
Fecha: época flavia, por su formulario y la forma de las letras.