La significación del término alumn(ae), que se refiere a la joven difunta en la línea 3, ha sido interpretada mal en algunos estudios de este epitafio (cf. Alonso Alonso 2015, 287; Seguí Marco 2015, 191-195). Aunque la representación del pandurium haya llevado a algunos autores a ver una relación de docencia de la música entre las dos personas mencionadas, alumna normalmente no se refiere a una discípula, sino siempre a la relación entre una expósita y la persona que la acogió. Lo confirma el gentilicium compartido por la madre de adopción, Lutatia Severa, y su "hija adoptiva", Lutatia Lupata. El cognomen de Lupata podría estar indicando que era una hija acogida por su alusión al mito de Rómulo y Remo criados por la loba (lupa).
Según Perea Yébenes (2023, 45), la representación del instrumento musical en manos de la difunta solamente indicaría que “ha sido educada”, y “educada como si fuese libre”, lo que quiere decir que no lo es “jurídicamente”, como indica precisamente el término alumna, el cual ha de entenderse en esta inscripción emeritense como “persona que ha sido criada, acogida y educada como una mujer libre, siendo una esclava inicialmente y luego liberta”.
La forma de las letras y la presencia de la formula D.M.s. sugerirían una fecha de mediados de la segunda mitad del siglo II d.C.