συλκαταίχαρε (= συγκατάχαιρε) posiblemente se trate de un simple error gráfico, o más probablemente aún, de lectura, y lo que ponga sea συνκατάχαρε. A diferencia de Ferrua (que postula una forma κατέχαρε como forma avanzada de aoristo indicativo o, aún más improbable, de imperativo), podría tratarse de una conmutación de las vocales en τα y χαι por ται y χα, posiblemente por alguien que copia sin saber griego, y que se trata del imperativo de indicativo de καταχαίρω. No se puede descartar que la supuesta iota sea en realidad un trazo vertical de separación de χαιρε en esta y otras inscripciones en vaso, como postula Jalabert en IGLS V 2467bis en el comentario a un vaso de Homs (ya citado por Gil 1976b, 549), y que en otros vasos aparece también entre otras palabras. El hápax συγκαταχαίρω es una contaminación entre las formas συγχαίρω y καταχαίρω. En ἐχφραίνου = εὐφραίνου no hay ningún proceso fonético que explique esta variante, por lo que, teniendo en cuenta la similitud gráfica entre la chi y la ypsilon, también aquí se habría producido un error de lectura (Hoz García-Bellido).
Monsalud interpreta Εὔα καταίχαρε καὶ ἐχ Χρ(ιστοῦ) φαίνου (Eva, regocíjate e ilumínate de Cristo). Es seguido en esta interpretación por Mallon - Marin, que consideran la inscripción falsa y aluden al signo cristiano del ancora hecho con la rho de la l. 4 (cf. S. Pablo, Ep. Heb. VII 19) y relacionan el texto en general con Ep. Ephes. V 14: Ἔγειρε ὁ καθεύδων καὶ ἀνάστα ἐκ τῶν νεκρῶν καὶ ἐπιφαύσει σοι ὁ Χριστός". L. y J. Robert (Bull.Ép.) interpretan la frase como ya lo había hecho Ferrua, y afirman que el falsificador parece haber copiado una inscripción de un vaso de Sidón con la inscripción que llevan estos objetos y que se adapta a su uso: κατάχαιρε καὶ εὐφραίνου. Esta fórmula es convival y no tiene por qué ser cristiana. Tiene su origen sin duda en otras fórmulas muy similares a las que no puede atribuirse un origen oriental, y que tienen una larga antigüedad en Grecia en distintos tipos de soportes y géneros epigráficos. Así por ejemplo la frecuente expresión χαῖρε καὶ πίε; o la aclamación χαῖρε καὶ ὑγίαινε que encontramos en la forma χαῖρε + nombre personal, ὑγίαινε + nombre personal (en griego) en las asas de un grupo de epitafios latinos de Lyon inscritos en tabulae ansatae (IGF nº 148-151). La fórmula tiene una gran antigüedad en Grecia, está atestiguada en epitafios pero también en otro tipo de epígrafes, por ejemplo en cartas privadas, en lugares diversos del mundo griego, y no está adscrita a ningún culto o doctrina religiosa concreta. Los verbos εὐφραίνειν (en su sentido intransitivo de “alegrarse” en voz medio-pasiva) y συνχαίρω aparecen por ejemplo en cartas privadas en papiros paganos y cristianos de los ss. III y IV d.C. (Hoz García-Bellido).
Gil (1976), igual que hicieron J. y L. Robert, relaciona esta inscripción con los epígrafes en vasos de Sidón, y considera que o bien Monsalud hizo uso erróneo de su memoria al transcribir sus quizá no fieles ni exhaustivos apuntes y creyó recordar que había visto el original de esta pieza en pizarra (como de hecho estaba una inscripción latina original de la que un falsario le hizo llegar además una copia), o bien esta inscripción, como la latina en pizarra, eran excelentes copias de inscripciones auténticas, aunque con algún error de transcripción en la griega. Gil duda respecto a la primera línea (ΕΥΑΙ? ΣΥΛΙ?) y dice que el hallazgo de la inscripción en alguno de nuestros museos podría resolver el enigma. Aunque no el original de esta transcripción con la forma συγκαταχαίρω con la que pudo abrirse el texto de la supuesta pizarra, la misma inscripción, con la forma καταίχαιρε (probablemente καταIχαιρε) aparece en un vaso sin duda del mismo origen oriental conservado en Barcelona (I. Canós, L’Epigrafia 2002, nº 305) que se ha considerado procedente del comercio de antigüedades, pero cuya procedencia hispana no es descartable. El hápax συγκαταχαίρω cree Hoz García-Bellido que es un argumento a favor de que la inscripción es original o bien copia de un original y no producto de una falsificación no basada en un modelo real (Hoz García-Bellido).